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Parque Metropolitano de Santiago inaugura su primer Punto Limpio

Tras meses de trabajo, el Parque Metropolitano -junto a las empresas VTR y TriCiclos-, inaugura el nuevo centro de acopio que recibirá los desechos reciclables de sus vecinos y visitantes que tendrá capacidad para almacenar 30 toneladas de material al mes.

El acceso de Av. Pedro de Valdivia Norte es conocido por ser el lugar por donde entran runners y ciclistas a practicar deportes al Parque Metropolitano de Santiago. Desde hoy, también lo será para todos quienes quieran reciclar. En una importante alianza público-privada, el pulmón verde de la capital se asoció con las empresas VTR y Triciclos, para instalar un nuevo centro de acopio y distribución de desperdicios, el primer Punto Limpio del recinto.

“Esta es una gran iniciativa que va en directo beneficio de todos los capitalinos, principalmente de los habitantes de las comunas colindantes al parque y de quienes suelen visitarlo. La idea es educar para que la comunidad  recicle sus desechos domiciliarios y, de esta manera, puedan darles un nuevo uso. Como ministerio, queremos incentivar este tipo de buenas prácticas que mejoran la calidad de vida de los ciudadanos de Santiago, ya que son ellos mismos los que asumen un rol activo en el cuidado de su entorno”, explicó el subsecretario de Vivienda y Urbanismo, Juan Carlos Jobet.

El nuevo centro de acopio significó una inversión de 12 millones de pesos y tiene la capacidad para gestionar entre 25 y 30 toneladas de desechos reciclables al mes. Según el director (TyP) del Parque Metropolitano, Mauricio Fabry, “este Punto Limpio era una tarea pendiente y hoy estamos orgullosos de tenerlo en nuestras instalaciones y entregar a las personas la posibilidad de reciclar y aprender a hacerlo correctamente”.

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Para financiar este proyecto, la empresa VTR aportó con recursos. “El Parque Metropolitano es un espacio privilegiado en el que convergen varias comunas que en su mayoría carecen de un centro neurálgico de reciclaje. Por eso nos parecía vital contribuir a crear un espacio de cultura y aprendizaje ambiental para las personas que visitan frecuentemente el Parque y así, impulsar una mayor conciencia ecológica entre los más de 4 millones de visitantes que circulan por aquí anualmente”, cuenta María José Fuentealba, subgerente de RSE de VTR.

Por su parte, el coordinador nacional de Parques Urbanos del MINVU, Martín Andrade, destacó la ubicación del nuevo Punto Limpio, en un lugar central de la vida al aire libre en Santiago: “Nuestro objetivo es, sin duda, ser un aporte para el medio ambiente, pero también ser un factor de inclusión social. A través de este Punto Limpio buscamos que los niños, jóvenes  y adultos de todo Santiago reciclen y se sientan parte del proceso y de la solución en el manejo de los desechos”.

Educar para reciclar

Tener el Punto Limpio instalado es sólo el principio del trabajo. La empresa Triciclos -responsable de ocho puntos limpios distribuidos en Santiago y uno recientemente inaugurado en Juan Fernández- es la encargada del retiro diario y coordinado de los distintos materiales depositados, los que serán previamente compactados en fardos de 30 kilos. Esta tarea se realizará de amera diferenciada, ya que habrá jornadas destinadas al retiro de las latas y otras, al retiro de los tetra pack, por ejemplo.

Además, se dispondrá de monitores dedicados a explicar el funcionamiento del Punto Limpio. “Sólo con educación podemos seguir adelante con este trabajo y hacerlo bien. Nuestros monitores enseñan al público que viene a reciclar de qué material es su desecho y dónde debe depositarlo. Ellos guían, enseñan y comprometen a los usuarios”, explica Rodolfo Poblete, gerente de Innovación de Triciclos. De este modo, la basura pasa a convertirse en materia prima, vuelve a ser útil y a formar parte de un círculo virtuoso de sustentabilidad social, económica y medioambiental.

Este sistema de equilibrio forma parte primordial del rol que cumple el Parque Metropolitano dentro de la ciudad. “Asumimos nuestro rol ecosistémico en Santiago. Por una parte, los árboles capturan el polvo en suspensión, absorben el CO2 y devuelven oxígeno al ambiente. Por eso, nuestro deber es, además, colaborar y mantener al parque libre de desechos”, recalca Fabry.

El Parque Metropolitano es un corredor biológico, una lengua de la cordillera en medio de la ciudad que no sólo es un pulmón para la respiración de la capital sino que también permite la vida de cientos de especies nativas de la flora y fauna, como aves y distintos mamíferos que lo habitan.

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