Puede que en México por lo general no se hable mucho sobre transgénicos. En parte no estamos muy enterados de lo que son los transgénicos, en parte nuestra apatía general se nos cruza, en parte la inversión mexicana en el campo ya es de por sí baja como para hablar de grandes proyectos y grandes laboratorios y aún no está completa la normatividad al respecto.

De cualquier manera, hay algunas solicitudes en espera a ser aprobadas para siembras comerciales de maíz transgénico. Si son aprobadas, se enfrentarán a una denuncia de hechos que presentó Greenpeace ante la Procuraduría General de la República (PGR).

La organización explicó en un comunicado que de acuerdo con la Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados (LBOGM), para que se otorguen permisos de siembras comerciales, las empresas deben presentar un Reporte de Resultados de las fases de siembra previas -experimental y piloto-; y las características de ese documento deberán ser establecidas por Normas Oficiales Mexicanas, mismas que todavía no han sido emitidas.

Hasta la fecha se han otorgado 195 permisos de siembra de maíz transgénico para las fases experimental y piloto sin un marco de bioseguridad completo. “La anterior administración ya infringió la ley”, denunció Aleira Lara, coordinadora de la campaña de Agricultura Sustentable y Transgénicos de Greenpeace. Ya que, como se menciona un poco más arriba, en realidad aún no está completa la normatividad para este tipo de cosechas en México y en realidad ninguna fase debería estar aprobada hasta el momento.

Si no sabes bien cuál es el problema de los Transgénicos, aquí te dejamos un video que te puede resultar informativo y también gracioso:

En realidad los problemas con los transgénicos son varios. A base de químicos y experimentación se intenta que las plantas crezcan más rápido, en menos tiempo, con menos recursos. El problema es que no sé ustedes, pero creo que ya tengo bastante con las hormonas que consumí sin saberlo muchos años y que provenían de vacas, por un alimento que en realidad no requiero para mi salud.

Aquí si es labor del consumidor informarnos un poco más sobre lo que comemos y consumimos. Antes no se hablaba de orgánicos en México porque no se necesitaban: tenemos una tierra muy fértil, maravillosa diversidad de climas y espacios suficientes de siembra como para tener que requerir a este tipo de alimentos. De hecho, seguramente no muchos mexicanos conocen la diferencia entre orgánico y transgénico.

Pero apliquemos una lógica mucho más simple, eres lo que comes. Y yo no quiero ser un montón de químicos y hormonas y experimentación genética. Gracias Greenpeace por defender el maíz de esta tierra.

Fuente: Insta Greenpeace ante la Procuraduría General de la República (PGR) a no permitir transgénicos.,(La Jornada)