¿Llegaron a ver Premium Rush? Esa película protagonizada por Joseph Gordon-Levitt, donde interpreta a un mensajero en bicicleta por las caóticas calles de la Gran Manzana. Hasta ese momento no sabía de la existencia de un servicio así; menos que existiera en la Ciudad de México. Hoy leyendo la historia de Nayeli Meza para Forbes, me doy cuenta de lo contrario. Nuestra capital tiene mensajería en bicicleta, una excelente alternativa sustentable.
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BicienVía es una cooperativa ciclista que, día con día, hace honor a sus preceptos: ser amigable con el medio ambiente, considera a los clientes sus amigos y ofrecer un servicio de calidad a precio justo. Sus 7 miembros fundadores se ven como iguales. Ninguno más que otro, cada uno responsable de un área determinada. Para ellos más que un trabajo es una pasión que comparten con sus amigos, en las entregas que realizan.
Ofrecen servicios programados, entregas inmediatas, entregas masivas y encargos. Cada uno con un costo en particular, dependiendo de los kilómetros a recorrer, el peso del envío y las características de la ruta — sí hay pendientes, se considera un costo extra —. Existe flexibilidad en sus servicios, que van desde entregar invitaciones hasta pedirles el favor de ir a la farmacia por un medicamento o buscar las llaves que se te olvidaron en el gym.
Esta iniciativa no es la única que anda pedaleando por las calles de la ciudad. El colectivo Bici-Mensajeros DF lleva 4 años repartiendo envíos por Distrito Federal y Zona Metropolitana. Su fundador y coordinador, Ollin Tonatiuh Hernández, se inspiró en la creciente tendencia en las grandes ciudades donde este servicio en bicicleta va en aumento. Reconoce a la bici como un medio de transporte eficaz y ecológico, una forma de movilidad urbana que busca impulsar.
En una ciudad que vive problemas de movilidad, entre el tráfico y las protestas, la mensajería en bicicleta tiene una gran oportunidad de crecimiento. Su principal competencia son las grandes empresas convencionales, nacionales e internacionales, que ofrecen el servicio de manera masiva, con el uso de camionetas y su correspondiente impacto ecológico. ¿Con cual nos quedamos?
Estos ciclistas dedicados entregan de todo, desde llaves hasta alimentos, desde documentos hasta pasteles, enfrentando los obstáculos de la urbe. Uno de los obstáculos más importantes es la falta de infraestructura urbana, que en ocasiones les impide asegurar su bici. Otro obstáculo es la falta de cultura vial, pues tienen que lidiar con los automovilistas frustrados en medio del tráfico. De nuevo, un problema por la falta de cultura ciclista que está dando gradualmente el cambio.
Al elegir mensajería en bicicleta apostamos a un envío sin emisiones, sin efectos contaminantes. Tenemos el beneficio de agendar entregas y tener un servicio inmediato. Unas propuestas que necesitan de nuestro apoyo para su crecimiento en la ciudad.
Link: Forbes
Foto: Javier Suárez Góme (Flickr) / (cc) by-nc-nd