Se quería liberar un batallón de moscas modificadas genéticamente para que combatieran las plagas que afectan a los productores de aceitunas en Cataluña. Oxitec promovía el primer ensayo de liberación de animales transgénicos en Europa con el fin de acabar con la plaga del olivo.
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La mosca del olivo es una plaga muy dañina en la producción de aceituna, difícil de erradicar incluso empleando los insecticidas más potentes. El insecto pica la oliva para depositar sus huevos y el fruto se echa a perder conforme la larva va creciendo, por ello la empresa Oxitec quería modificar genéticamente a la mosca macho para que tras aparearse con las hembras silvestres, las larvas murieran antes de desarrollarse y con ello, reducir la población. La clave está en que, al morir antes de ser adultas y no poder ser fecundadas, se disminuiría la población de insectos hasta vencer la plaga, según el plan trazado.
El experimento tendría una duración de tres meses, y con este fin se iba a usar un campo de 48 olivos (que se cubrirían con mallas) en un área de 1.500 m en una finca de la provincia de Tarragona, donde se liberarían las moscas macho transgénicas desarrolladas. Oxitec destacó las bondades de su solución indicando que esta fórmula reduciría el uso de insecticidas (método poco selectivo para combatir los insectos). Inicialmente, la Generalitat juzgó que esta autorización no era competencia suya, sino del Ministerio de Agricultura (pues sus funciones sobre bioseguridad sólo estaban claras en el caso de variedades de cultivos transgénicos).
De conseguirse el permiso, durante ocho semanas se introducirían dos tandas de moscas por semana, ya que esta especie solo vive unos días. Al principio, unos 10 machos por hembra normal, cantidad que se ajustaría sucesivamente. Una vez que estas moscas transgénicas machos son liberadas van a buscar a las hembras silvestres, se aparean y las crías al heredar el gen mueren.
Pero, las protestas de los ecologistas, temerosos de los impactos de una posible liberación de las moscas en el medio ambiente, terminaron por hacer que fracasara el proyecto. “Creemos que se debería aplicar un principio de precaución y que las dos administraciones deben rechazar la solicitud”, declaró Blanca Ruibal, experta de agricultura de Amigos de la Tierra. “Predecir los impactos que tendría una mosca en cuyo ADN se han insertado genes de otros organismos es ir demasiado lejos”, dice Ruibal, además de genera muchas incógnitas sobre su interacción en el medio ambiente y las consecuencias que provocarían.
Fuente: Rechazado el plan para liberar moscas transgénicas en Tarragona