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Cuotas de captura de merluza disminuirán en 2014 en Chile

Reducción de la cuota de captura ayudará a recuperar la biomasa del recurso, pero generará efectos sociales y económicos que deben ser mitigados por dicho Plan.

La Ley de Pesca chilena, o Ley Longueira si bien incluyó criterios de sustentabilidad por sistema de cuotas, mantuvo el mar privatizado en pocas manos y restándole importancia a la pesca artesanal supeditada por la de arrastre que arrasa con el ecosistema marino.

Como consecuencia la Subsecretaría de Pesca ya ha informado que las cuotas de captura establecidas para las diferentes pesquerías en Chile, disminuirá los niveles a capturar que se encontraban vigentes para 2013.

En el caso de la merluza común, la cuota baja de 40 mil a 19 mil toneladas para 2014, lo que obedece a que la situación biológica del recurso no ha mejorado. Por el contrario, su biomasa disminuyó en un 17% durante el último año, según la evidencia científica analizada por el Comité Científico Técnico. Así, esta reducción en los niveles permitidos de captura apunta en la dirección correcta si se pretende garantizar la recuperación de la biomasa de los principales recursos pesqueros.

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El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) apoya esta medida, justificada en términos científicos, pero como subraya su Coordinador Regional de Pesquerías para el Cono Sur, Mauricio Gálvez, también es consciente de que la caída de la cuota traerá importantes ajustes en la actividad pesquera industrial y artesanal.

“Los efectos económicos y sociales que esto provoque deben encontrar un soporte en el Plan de Manejo y Recuperación de la Pesquería, el cual debe ser desarrollado por el sector artesanal e industrial junto al gobierno”, enfatiza Gálvez.

Como un aporte a esta definición, WWF Chile ha elaborado una propuesta que consigna los 10 elementos básicos que debería considerar el Plan de Manejo y Programa de Recuperación de la Pesquería de Merluza Común.

Algunos puntos destacados son el fijar objetivos precisos y medibles, no solo para la recuperación de la biomasa de merluza, sino que también para lograr que la pesquería sea socialmente equitativa y económicamente viable. Además, se propone el diseño e implementación de un Programa de Fiscalización Especial, con participación de diversas instituciones y con espacio para la participación ciudadana y de los propios usuarios de la pesquería.

A esto se suma la creación y puesta en marcha de un mecanismo financiero que entregue créditos blandos y/o apoyos financieros no reembolsables a los usuarios más vulnerables, de tal manera que se facilite la implementación del Programa de Recuperación. Dicho mecanismo financiero debiera disponer de un fondo equivalente al valor de la captura que se puede obtener en una condición de sustentabilidad; no debe ser un parche a la crisis, sino más bien un mecanismo de largo aliento para recuperar la pesquería.

Según puntualiza Mauricio Gálvez, WWF Chile seguirá trabajando, con visitas a las principales caletas merluceras, de tal manera de compartir estas ideas y apoyar las que emerjan del propio sector, siempre que el horizonte sea la recuperación de tan importante pesquería.

Mira los 10 puntos de la propuesta 

 

 

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