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5 remedios naturales para el bienestar de tu hijo

Después de consultar al médico, puedes complementar el tratamiento de tu hijo con algunos remedios naturales.

Los niños son geniales, preguntan de todo y exploran el mundo con imaginación y sin miedo. Sin embargo, muchas veces los niños y bebés pueden enfermarse o tener malestares. Luego de llevarlos al doctor, puedes completar su tratamiento con algunos remedios naturales.

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1. Para evitar y aliviar los cólicos

Los cólicos son dolores estomacales que sufren casi todos los recién nacidos. Comienzan a las 2 semanas de vida y pueden durar hasta los 3 o 4 meses. Te darás cuenta que tu bebé tiene cólicos porque llora constantemente, tiene muchos gases intestinales, se retuerce y a pesar de que lo alzas igualmente continúa llorando.

Para evitar los cólicos, debes estar atenta, sobre todo si tu bebé no toma leche materna,y consulta con el doctor que el sustituto que le das no le esté haciendo daño. Debes evitar que se alimente en posición horizontal o acurrucado, porque esto ayuda a que sufra esos molestos dolores. Si le das leche materna a tu hijo, debes comprobar  si tiene la boca el pezón y la areola. De lo contrario, no sólo tu hijo estará ingiriendo aire lo que le producirá cólicos, sino que también tu pecho se irritará, lo que podrá derivar en que sufras mastitis u otros trastornos.

Para aliviar los cólicos acuéstalo boca arriba en una superficie firme y mueve sus piernecitas como si estuviera andando en bicicleta hasta que expulse los gases que lo están molestando. También puedes masajear su vientre y realizarle suaves masajes en la espalda. O puedes intentar darle calor con una bolsa de agua tibia o levántalo y mécelo, muchas veces esto ayuda a calmarlo.

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2. Remedios contra las erupciones infantiles

Tu hijo puede tener erupciones en la piel sin causa aparente, pero muchas veces se deben a microorganismos ambientales, alergias al clima o a algún producto externo.

La más común es por irritación del pañal. Una vez que aparezca la irritación lo mejor es tener al  bebé sin pañal tanto como sea posible, así como aplicar fécula de maíz (no talco) o avena reducida a un polvo muy fino en el área irritada. También son muy buenos los baños de avena durante el día.

Otra de las causas puede ser la Tiña, sobre todo si el niño está en contacto con animales. Aunque existen muchas cremas antifúngicas para tratar la tiña en los niños, es mucho más beneficioso para la piel de los pequeños utilizar productos como el aceite del árbol de té o vinagre de manzana, (preferentemente diluidos para suavizar sus propiedades). Basta mojar un algodoncillo en dichas sustancias y aplicar en el área afectada varias veces al día, mientras dure la infección.

Si tu hijo presenta sarpullido, puedes controlarlo aplicando fécula de maíz o avena muy fina. En este último caso, poner la avena en un procesador y reducir a un polvillo muy fino. Simultáneamente se debe bañar al pequeño con agua de avena o con manzanilla. Procura mantenerlo con ropas muy frescas y de algodón preferentemente.

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3. Remedios para el Sarampión

El sarampión es una enfermedad bastante frecuente en los niños, cuyos síntomas aparecen 2 semanas después de contraer la infección, los cuales son: tos seca, el resfriado, la fiebre elevada y una erupción cutánea en todo el cuerpo.

Como principal medida es indispensable el descanso hasta que la fiebre y la os hayan pasado, para no permitir que la enfermedad se propague. Un remedio casero efectivo es  el agua de cebada, ideal para aliviar los síntomas de la tos seca, para suavizar la piel irritada por la erupción y aliviar el molesto picor. Además, hay que comer abundantes frutas y verduras para tener una recuperación exitosa.

Para aumentar la inmunidad del organismo durante la recuperación de la enfermedad, prepara polvo de cúrcuma mezclado con leche o miel de abejas. Para los niños pequeños, remplaza la cúrcuma con regaliz en polvo, que dará el mismo resultado. Es necesario que en el período de convalecencia te hidrates bebiendo líquidos en abundancia, lo ideal es tomar jugos de frutas naturales y bebidas isotónicas para recuperar los minerales y vitaminas perdidos durante el período que se sufre fiebre. Evita exponer tus ojos a la luz solar directa, pues se ponen muy sensibles durante el tiempo que dure el sarampión, y procura que la habitación esté ventilada.

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4. Remedios caseros para eliminar los piojos

La pediculosis es bastante normal en los niños y algunos adultos. Los piojos se pegan sobre todo en el colegio, y hay muchos productos para evitar esta infección, pero generalmente estos productos son costosos, pueden generar reacciones alérgicas y no siempre surten efecto.

Para eliminar naturalmente piojos y liendres, primero debes usar Cedro Santo aplicando una maceración de éste con alcohol en todo el cabello, haciendo énfasis en las raíces.  Luego, envuelve el cabello con una funda plástica y dejar actuar durante una media hora. Para la maceración del cedro santo debes tener un paquete de la corteza de este árbol y dejar macerar 40 grs. en un litro de alcohol blanco durante 3 días.

Luego lavar el cabello con un shampoo normal y enjuagar con preparación de vinagre de manzana y agua, en partes iguales. El vinagre de manzana es muy efectivo para utilizarlo como enjuague y dejarlo en el cabello, luego de haberlo lavado, ya que este terminará de exterminar aquellos piojos que puedan haber quedado vivos y ayudará a que las liendres se deslicen fácilmente y poder quitarlas sin dificultad con el peine fino.

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5. Remedios caseros para ayudar a dormir a tu bebé

Para que tu pequeño concilie mejor el sueño, debes hacer una mezcla herbal, que constará de pétalos de rosa, camomila, lavanda y esencia de vainilla, jazmín, mandarina o bergamota. Luego de tener todo esto, debes mezclarlos bien y colocarlos en una bolsa de tela que puedas abrir, para luego comprobar que la esencia sigue estando activa, o rellenarla con ella cuando sea sea necesario. Coloca esta bolsita junto al bebé en la cuna y se relajará, y podrá dormir tranquilamente… y tú también.

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