La desgarradora foto del padre que toma la mano de su hija bajo los escombros en Turquía se ha vuelto viral, no solo por el impacto que ha generado en el mundo entero, sino por la gran cantidad de mensajes que ella manifiesta, así como por la historia que hay detrás de ella.
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Y es que a pesar del dolor que éste pueda sentir ante la inminente muerte de su pequeña, deja ver cómo aún hay esperanzas en él de que su pequeña sea removida de entre las ruinas y bloques de cemento para rendirle una digna sepultura. Por eso, aunque su vida se haya partido en dos, él espera paciente a que los rescatistas puedan ayudarlo en este tan lamentable momento que le ha cambiado la vida, pero en el que demuestra el amor que sentía por su hija.
Pero, luego de este momento que quedó registrado ante las cámaras, se pudo conocer más allá de lo que realmente vivió Mesut Hancer, un hombre turco que ante la desesperación y desconcierto que generó el fuerte terremoto corrió hasta el cuarto de Irmak, quien dormía tranquilamente en su cama, pero todo fue muy rápido, una vez que logró ingresar ya todo se había venido abajo dejando como resultado el cuerpo de la chica de 15 años totalmente aplastado por una gran cantidad de ladrillos y objetos contundentes.
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Historia de la desgarradora foto del padre que toma la mano de su hija bajo los escombros en Turquía
Adem Altan, de la agencia AFP, fue el encargado de realizar la desgarradora foto del padre que toma la mano de su hija bajo los escombros en Turquía, éste pudo conocer parte del estremecedor relato de este hombre que no ha podido reaccionar ante la muerte de su pequeña, pues él solo mantiene la esperanza de que sean removido los escombros para así remover el cuerpo y darle sepultura.
A criterio del fotoperiodista internacional, este señor posee una mirada perdida, pero a pesar del dolor que posee se niega a separarse de Irmak a quien le toma la mano como para recordarle lo mucho que la ama y que a pesar de que todo está perdido ella no está sola.
Reconocerla fue una tarea ardua, solo su padre pudo tener la certeza de que se trataba de su hija quien no se dio cuenta de toda la catástrofe que se le venía encima, pues ella descansaba sin saber que en minutos todo acabaría para ella. Ahora, en medio de la desolación y miles de pesados escombros, se espera que su cadáver sea sacado de los hierros retorcidos, enormes y muy pesados bloques, así como el polvo y demás sedimentos que acabaron con su vida que apenas estaba por comenzar.