Las comunidades de Peñalolen, La Reina y San Carlos, en Santiago de Chile, están preocupadas por la existencia de un Reactor Nuclear, en La Reina ubicado sobre La falla de San Ramón, la que atraviesa 7 comunas de la ciudad de Santiago, pasando por zonas de abanicos aluviales que amplifican las ondas sísmicas en caso de terremoto.
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Colocar un reactor nuclear cercano esta falla activa y sobre un abanico aluvial, es una situación que por muy insólita que nos parezca, sucede en Chile, un país que tiene como característica su telúrico comportamiento.
Tras 10 años de estudios desarrollados por un equipo de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la U. de Chile, que en conjunto con investigadores del Instituto de Física del Globo de París, le han seguido la pista a la falla de San Ramón,esta gran cicatriz formada de la fractura de las rocas y que puede causar un sismo entre 6,9º y 7,4º Richter.
En el programa Por qué en mi jardín transmitido por la señal de Televisión Nacional de Chile, se dedicó a este tema que tiene como historia central, la preocupación de un vecino que sufrió el año 86, en carne propia, el desastre de Chernobyl.
Paralelamente se expuso el caso de todos los conscriptos del Ejercito de Chile que trabajaron en este proyecto entre el 88 y 89, donde tuvieron que limpiar una crisis nuclear, como si fuera cualquier tipo de suciedad, con paños y en contacto directo con los desechos tóxicos. Producto de la radiación quedaron absolutamente dañados, ellos y sus retoños. Dolores constantes, diarrea, cáncer, inmuno deficiencia y hasta la muerte.
Están sus casos siendo evaluados aun por la justicia, que ha tardado lo suficiente para seguir dañando a la gente. Sin embargo, quienes realizan labores en el reactor se defienden de que sólo funciona los viernes en la mañana y se tomará la medida de instalar un sismógrafo en las dependencias. Explican que el reactor es muy importante para la “investigación científica” y su aporte que hace a la medicina.
Vía: Por qué en mí Jardín