A este paso la tecnología nos deja cada vez con más basura tecnológica, toneladas de equipo que contienen sustancias tóxicas y metales pesados que pueden contaminar el suelo, el aire, el agua — o, bien, los equipos quedan arrumbados en un rincón de nuestra casa. ¿Qué podemos hacer con este equipo?, ¿se puede implementar el principio de las 3R: reducir, reciclar, reutilizar?
Considerando este problema ambiental y la necesidad de tecnología en el área de la educación, unos emprendedores ecuatorianos crearon Greenetics, proyecto que destacó en la Competencia de Talento e Innovación de las Américas, TIC Américas 2014, en la categoría Eco-Reto, como un proyecto social que ofrece una solución a este problema ambiental.
Greenetics, tecnología verde para educar
Greenetics plantea la implementación y reestructuración de laboratorios informáticos mediante la reutilización de equipos considerados obsoletos —por sus reducidas capacidades tecnológicas—, que podrán dar al estudiante una experiencia de uso similar al de un computador actual.
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El objetivo de Greenetics es brindar servicios y sistemas educativos orientados en la optimización de costos con un enfoque medioambiental. Se reducen costos, se aprovecha el equipo —que aunque obsoleto es funcional—, se evitan gases efecto invernadero y se promueve el cuidado al medio ambiente.
La educación es, sin duda, uno de los sectores más afectados por la evolución de la tecnología. Cada vez es más frecuente el cambio de equipos para actualizar los laboratorios. Esto genera un alto índice de desechos, lo que es conocido como RAEEs (residuos de aparatos eléctricos y electrónicos). Con la solución que propone Greenetics, este proceso será mucho más verde y amigable con el sistema de educación.
¿Cómo funciona?
El proyecto utiliza una plataforma educativa que provee servicios para convertir una computadora regular en un servidor, con la capacidad de realizar las tareas de todo el laboratorio — la maquinas obsoletas —.
Es un ambiente de cliente-servidor, donde el cliente es un equipo de baja capacidad que no realiza procesos (cliente ligero). Es sólo una pantalla que muestra la información que el servidor envía y permite al usuario interactuar como si fuera una computadora independiente. El servidor se encarga de todo el proceso y almacenamiento. Es el corazón del laboratorio.
Por lo pronto, el proyecto tiene un plan piloto en el colegio Manuela Cañizares, Quito, Ecuador. Se está presentando en diferentes convocatorias, como TIC América; ahora en agosto competirán en el Global Tic a realizarse en Taiwán. Pueden conocer más del proyecto en su página web y en Facebook, Greenetics.