Levantarían la emergencia en el río Sonora a pesar de presencia de tóxicos

Entre la postura de Grupo México y las acciones de las autoridades correspondientes, la situación del río Sonora se torna cada vez más turbia. La empresa responsable de la mina de Cananea y los municipios “se pasan la bolita”, como dicen por ahí, con respecto a la distribución de agua potable a las comunidades afectadas. Mientras tanto, consideran levantar la emergencia en la zona.

Protección Civil — a nivel estatal y federal — y la Comisión Nacional del Agua (Conagua) consideran que el próximo lunes se podría levantar la alerta causada por este derrame, el cual afectó a 22 mil habitantes de siete municipios. Esto dependerá del resultado de las mediciones a realizar el viernes.

Por la situación en la que se encuentra el río Sonora y los eventos reportados últimamente, se podría pensar que está posibilidad está lejos de suceder.

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De acuerdo con La Jornada, los alcaldes de Aconchi, Pedro Armando Lugo López, de Arizpe, Vidal Vázquez Chacón, y del municipio más afectado, Banamichi, Jesús Lauro Escalante, denunciaron que “volvió a correr la contaminación” en el río Sonora. Durante el fin de semana, el caudal creció lo suficiente para arrastrar sedimentos de la minera — restos que no fueron atendidos.

Se registró, de nuevo, la coloración amarillenta-rojiza característica del derrame, por lo que los habitantes alertaron a Protección Civil estatal, quienes minimizaron el reporte; “precisaron que no se trataba de un nuevo derrame, sino que por las lluvias se dio una crecida del río que arrastró los contaminantes que quedaron en las márgenes.”

En el grupo de Facebook Desastre Ecológico en el río Sonora se reportaron casos de personas con quemaduras, esto como resultado de estar en contacto con el agua del río, después de que Grupo México afirmó que el líquido estaba en buenas condiciones.

Por si fuera poco, además de la muerte de peces, se ha registrado la muerte de tres caballos en la zona — se realizan los análisis correspondientes para determinar que estos decesos estén relacionados con la contaminación en el río.

Estamos ante un caso grave de impacto ambiental, ocasionado por el derrame de ácidos tóxicos y metales pesados. Por la magnitud de su efecto, valdría la pena cuestionar si las autoridades están haciendo lo suficiente para garantizar el bienestar de los habitantes de estos municipios afectados — sin mencionar las sanciones que debería recibir Grupo México.