Más de veinte ciudades en China se encuentran bajo alerta roja debido a la elevada contaminación atmosférica que las afecta desde el fin de semana.
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Las más afectadas han sido Pekín, Tianjin. Debido a la gravedad de esta situación, las autoridades han decretado el cierre de escuelas, fábricas y algunas autopistas hasta el miércoles. En tanto, cientos de vuelos debieron ser cancelados en los aeropuertos.
También, algunos municipios han determinado el aumento en la capacidad del transporte público debido a las restricciones a los vehículos particulares.
En tanto, el número de niños que ha debido a asistir a los consultorios debido a problemas respiratorios se ha incrementado desde el fin de semana.
“Si uno se remonta al primer día de este episodio, puede ver que la capa de esmog (en Beijing) se mueve despacio desde el sur de la zona urbana de Beijing y después hacia el norte“, explicó Dong Liansai, activista climático de Greenpeace en Beijing.
La polución en el norte del país ha superado en más de cien veces el límite establecido por la Organización Mundial de la Salud.
